Merkaba Latón

Juego Formas Platónicas en Cuarzo Blanco Desde el microcosmos hasta el macrocosmos observamos que todas las estructuras atómicas de la materia orgánica e inorgánica se combinan entre sí según disposiciones estables. La interacción entre los elementos se presenta geométricamente en forma de polígonos y en su estructura tridimensional en forma de poliedros. En la naturaleza solo existen cinco poliedros regulares que se disponen de forma estable por la igualdad que presentan en su estructura ( lados, ángulos y caras) y que son la base del resto de las formaciones geométricas. Platón considera que toda la formación del universo está generando en base a estos cinco poliedros, que en su honor se conocen como sólidos platónicos y los relaciona con los cinco elementos ( éter, agua, aire, fuego y tierra), esencias en las cuales basa el creador para manifestar estas formas arquetípicas. Estas formas resonadoras de arquetipos mórficos tienen su frecuencia vibratoria, poseedora de una profunda información y representan un código universal o un patrón armónico con una serie de contenidos que dan paso a ciertas modificaciones en el campo energético de los seres vivos y de los espacios en que nos movemos. Los podemos aplicar sobre nosotros mismos para equilibrarnos y armonizarnos. También son muy útiles para armonizar lugares o espacios como la casa, la oficina, escuelas o cualquier otro lugar que consideremos oportuno. DODECAHEDRO: Representa el Éter y es el armonizador por excelencia. Es relajante y representa el amor universal. Útil en estados de nerviosismo. ICOSAEDRO: Representa al Agua y está relacionada con nuestro mundo emocional. Es más activadora energéticamente y es útil en estados de decaimiento. OCTAHEDRO: Representa al Aire y está más relacionada con nuestro campo físico etérico. Es muy útil para armonizaciones a este nivel. HEXAEDRO: Representa a la Tierra y al mundo de la materia. Así que por consiguiente trabaja mejor nuestros aspectos más físicos. TETRAEDRO: Representa al fuego y está más relacionada con lo mental. Trabaja aspectos relacionados con este último así como con sobrecargas energéticas. Peso aproximado: 32gr

El Dodecaedro es un poliedro regular de doce caras, de construcción reticular con esferas en los vértices. Tiene propiedades de armonizador energético debido a su proporción áurica o numero PHI que se encuentra en todas sus partes. El número PHI lo encontramos en muchas formas de la naturaleza. El Dodecaedro representa el Éter y es el armonizador por excelencia. Es relajante y representa el amor universal. Se asocia al color azul índigo. Su dual o o complementario es el Icosaedro. Se corresponde con el cuarto chakra. Está compuesto por doce caras pentagonales y veinte esferas en sus vértices que aumentan y potencian la vibración de sus ondas de forma que armonizan el ambiente del lugar en que se halla.

Desde el microcosmos hasta el macrocosmos observamos que todas las estructuras atómicas de la materia orgánica e inorgánica se combinan entre sí según disposiciones estables. La interacción entre los elementos se presenta geométricamente en forma de polígonos y en su estructura tridimensional en forma de poliedros. En la naturaleza solo existen cinco poliedros regulares que se disponen de forma estable por la igualdad que presentan en su estructura ( lados, ángulos y caras) y que son la base del resto de las formaciones geométricas. Platón considera que toda la formación del universo está generando en base a estos cinco poliedros, que en su honor se conocen como sólidos platónicos y los relaciona con los cinco elementos ( éter, agua, aire, fuego y tierra), esencias en las cuales basa el creador para manifestar estas formas arquetípicas. Estas formas resonadoras de arquetipos mórficos tienen su frecuencia vibratoria, poseedora de una profunda información y representan un código universal o un patrón armónico con una serie de contenidos que dan paso a ciertas modificaciones en el campo energético de los seres vivos y de los espacios en que nos movemos. Los podemos aplicar sobre nosotros mismos para equilibrarnos y armonizarnos. También son muy útiles para armonizar lugares o espacios como la casa, la oficina, escuelas o cualquier otro lugar que consideremos oportuno.

OCTAEDRO: Representa al Aire y está más relacionada con nuestro campo físico etérico. Es muy útil para harmonizaciones a este nivel.

FLASKA SPIRITUAL FLOR DE LA VIDA La colección Flaska Spiritual está formada por Flaskas protegidos por fundas de diferentes materiales grabadas o bordadas con símbolos espirituales. Ventajas: 100% vidrio para cuidar de tu salud cristal programado para estructurar el agua funda y tapón están hechos de un material natural - el corcho Cristal de Love & Gratitude grabados en la funda símbolos expiritales diferentes sin derrames respetuosa con el medio ambiente hecha en Eslovenia, EU

Posavasos con el símbolo Flor de la vida fabricado en corcho Contenido 6 unidades Tamaño 8x0.5cm

El Medallón hecho con acero quirúrgico y 4 elementos minerales está estructurado a nivel cuántico en una antena sintonizadora de tachyones. Los atrae y los concentra en la persona que lo lleva: Los Tachyones son la primera estructura energética condensada que proviene de la Energía Cósmica Divina omnipresente y que viaja a más de mil veces de la velocidad de la luz. Posee en sí mismo todo el potencial armónico de cualquier frecuencia de Energía alterada y artificial por resonancia natural.

-Nos protege de la contaminación de malas energías tanto electromagnéticas de los aparatos eléctricos, antenas y teléfonos móviles, WiFi y torres de alta tensión como los provenientes de personas alteradas.

-La Energía Tachyon unida a la Geometría Sagrada armoniza todos los campos energéticos que rodean al cuerpo así como los niveles físico, mental, emocional y espiritual.

-Ayuda al aumento en la resistencia y energía física, claridad y concentración mental.

-Ayuda a disminuir los síntomas de dolores generales en el organismo produciendo una sensación de bienestar.

-Armonización y equilibrio de nuestro sistema energético y chakras. Nos apoya en nuestra evolución espiritual y desarrollo de la intuición, mayor capacidad para la meditación y conexión con nosotros mismos y la naturaleza. Esto se traduce en un bienestar general, más equilibrio, serenidad y sosiego.