Set de 3 diapasones perdidos del Solfeggio..

¡Esta campana es todo un clásico! Está afinada en las últimas notas de la famosa 9ª sinfonía de Beethoven que se estrenó en Viena en 1824. Fue un éxito rotundo. Dicen que al acabar la representación, el compositor que era sordo, estaba ensimismado en la partitura sin escuchar los aplausos; fue entonces cuando uno de los solistas le tocó el brazo y Beethoven pudo ver los pañuelos y las manos ovacionándole. Ésta fue la última aparición pública del genio alemán, quien falleció 3 años más tarde. Para el cuarto movimiento, Beethoven utilizó en parte el poema de Friedrich Schiller Oda a la Alegría: "¡Abrazaos, millones de seres! ¡Este beso al mundo entero! Hermanos, sobre la bóveda estrellada Debe habitar un padre amante. ¿Os postráis, millones de seres? ¿Mundo, presientes al Creador? ¡Búscalo por encima de las estrellas! ¡Allí debe estar su morada! ¡Alegría, bella chispa divina, Hija del Elíseo! ¡Penetramos ardientes de embriaguez, ¡Oh celeste, en tu santuario! Tus encantos atan los lazos que la rígida moda rompiera; y todos los hombres serán hermanos bajo tus alas bienhechoras. ¡Alegría, bella chispa divina, Hija del Elíseo! ¡Alegría, bella chispa divina!” En el 1985, el Himno a la Alegría se convirtió en el Himno Europeo oficial. ¡Qué la alegría que inspiró esta campana os acompañe siempre! La afinación de esta campana tiene una garantía de por vida.

Un hermoso árbol de la vida: ¡añada un poco de elegancia a la vida de sus clientes! Este estilizado Árbol de la Vida tiene dos pájaros en sus ramas. Símbolo profundo, el Árbol de la vida puede representar fuerza, belleza, recompensa y redención, por lo que es un excelente regalo para casi cualquier ocasión. Esta campana está diseñada para colgarse de una cuerda en vez de una arandela. Altura total de 6 cm, 4 varillas de aluminio plateado, elementos decorativos de acero inoxidable

Cojín para cuenco tibetano

Dimensiones 14x14cm.

Cuenco sonoro de cristal transparente 1er Chakra - Muladhara - Tono Do - Rojo

Viene con una bolsa de transporte, dos mazos y un anillo de goma para estabilizarlo.

Los cuencos sonoros de cristal fabricados por expertos producen sonidos maravillosos y potentes. Fabricados con cristales de cuarzo puro en polvo calentados a varios miles de grados, el proceso de calentamiento funde las partículas para formar cada cuenco. Afinados con notas musicales específicas, el tamaño del cuenco influye en el tono: los cuencos más pequeños producen notas más agudas, mientras que los más grandes producen tonos más graves. Los tonos altos elevan y limpian, mientras que los bajos favorecen la relajación y la conexión a tierra, aunque los efectos pueden variar de una persona a otra.

Nota: No coloques nunca la cabeza dentro de un cuenco sonoro ni lo golpees demasiado fuerte cerca de ella. Mantén una distancia segura entre varios cuencos para evitar vibraciones que puedan romperlos. Además, infórmese sobre posibles molestias si alguien tiene clavijas metálicas o rótulas de acero inoxidable en el cuerpo mientras utiliza el cuenco en sus proximidades.

Se considera normal una desviación de hasta 2 Hz más o menos.

Cuencos cantores de cristal
Para explorar sus sonidos únicos, prueba con diferentes mazos como los de goma, cuero, fieltro o lana. Nunca utilices varillas de madera, ya que pueden dañar estos vulnerables cuencos. Cada mazo produce un sonido y una vibración distintos, por lo que hay que elegir el adecuado para el efecto deseado. Con este artículo se incluyen un mazo de ante y otro de goma.

Al pedir un cuenco de una sola nota, tenga en cuenta que puede producir un sonido plano o agudo debido a la escasez de notas perfectamente afinadas. Los tamaños de los cuencos pueden corresponder a más de una nota, dependiendo de factores como el peso, la altura de las paredes y el grosor, y las notas asignadas a los tamaños de los cuencos pueden variar según el proceso de fabricación y la precisión de afinación.

La combinación de cuencos de cristal puede crear armónicos, generando diversos efectos en las personas según sus circunstancias. En entornos terapéuticos, estos cuencos ayudan a reequilibrar y armonizar, pero se recomienda no hacerlos sonar continuamente durante más de 15-20 minutos para evitar una sobrecarga de energía. Mantén siempre intenciones positivas al hacer sonar el cuenco, ya que se convierte en una extensión de ti mismo durante el proceso.

Se puede actuar sobre chakras específicos utilizando cuencos afinados en consecuencia: Primero (B) - conexión a tierra; segundo (A) - creatividad y sexualidad; tercero (G) - autoestima y prosperidad; cuarto (F) - amor y salud; quinto (E) - comunicación y creatividad; sexto (D) - intuición, desarrollo psíquico; séptimo (C) - conexión espiritual.

Los tonos de los cuencos de cristal pueden realzarse vocalizándolos, combinándolos con el poder del pensamiento o afirmaciones positivas. Prepararse con un ejercicio de respiración y visualizaciones ayuda a establecer el estado de ánimo adecuado antes de hacer sonar el cuenco. Las afirmaciones deben expresarse positivamente en el momento presente para facilitar el cambio de energía y conciencia deseado.

Golpea el cuenco suavemente cerca del borde superior y sigue el sonido alrededor del cuenco con la varita o el mazo para obtener tonos más amplios y fuertes. Confía en tu intuición con respecto al movimiento y las intenciones mientras utilizas el cuenco.

432 hercios (Hz)
El sonido y la música se componen de vibraciones. Cuanto mayor sea el número de vibraciones por segundo, mayor será el tono. La unidad para esto es el Hertz (Hz). 432 Hz es el "tono natural" del universo. Ese tono está entrelazado en la naturaleza, en las matemáticas, en las órbitas planetarias, en todo el universo. Toda la música clásica de Bach, Brahms, etc., se compuso y se interpretó originalmente utilizando el La (=A4) "estándar" en 432 Hz. Nuestra serie de cuencos tibetanos de cristal "432 Hz" también están afinados de esta manera.

Las notas en la escala de 432 Hz no sólo son más agradables al oído, sino que también garantizan una resonancia armoniosa de todo tu "ser" con nuestro planeta y el universo. Esta resonancia natural conduce a un mayor bienestar tanto del cuerpo como de la mente.