El poder del cristianismo
El poder del cristianismo
- EAN: 9788495720023
- ISBN: 9788495720023
- Editorial: Fosfenismo,Ediciones (Instituto Fosfenologia)
- Año de la edición: 1753
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 150 X 210 mm.
- Páginas: 288
(0 Comentarios)
Comenta y valora este libro
En stock. Envío inmediato.
Descripción
La no-violencia es un método de combate, y el mejor de todos. La estructura psicológica de quien practica los mandamientos del Evangelio es exactamente opuesta a la estructura del paranoico.
En muchos pasajes del Evangelio, se hace alusión a los principales ejercicios de Yoga, pero en el pasaje siguiente se crea una ruptura narrativa que esconde el significado del ejercicio para quien no está iniciado.
Las reglas morales de Cristo derivan de la aplicación de la ley del karma de los hindúes.
La plegaria asociada a los balanceos del cuerpo, como es costumbre en Asia, tiende a crear un flujo del pensamiento, en una forma que contiene un alto grado de simetría y de polarización. Esta costumbre explica el número impresionante de palabras de Cristo marcadas con el sello de esta dualidad. En los Evangelios apócrifos, que sin embargo contienen diversos pasajes realmente auténticos, esta polarización del pensamiento está todavía más marcada.
La comunión es, entre otras cosas, un símbolo de la forma en que los mandamientos del Evangelio deben ser asimilados por nuestra inteligencia y deben manifestarse en nuestro comportamiento por una recombinación entre ellos en función de nuestra naturaleza.
La reencarnación, claramente indicada en varios pasajes del Evangelio, es la cicatrización de la muerte.
La interjección «amén» es la deformación que ha hecho necesaria la transcripción al alfabeto latino de un sonido hebraico de tres letras, que muy probablemente se pronunciaba
A-U-N y expresaba mucho mejor fonéticamente el equilibrio de las polaridades y la relación entre ellas.
La presencia de los magos, es decir de los sacerdotes de Zaratustra, en el nacimiento de Cristo prueba la gran influencia zoroastriana en el origen del cristianismo.
Una fotografía de las vidrieras de la catedral de Amiens, en la que se observa claramente a los santos en posición de convergencia ocular, muestra que durante las cruzadas el catolicismo se fortaleció en las verdaderas fuentes del cristianismo: los ejercicios iniciáticos.
Otros libros de Fosfenismo
La respiración rítmica y la concentración mental
Podemos considerar al ser psíquico como un organismo autónomo, homólogo de su propio organismo físico: a ciertos órganos del cuerpo les corresponden ciertas características del otro, a ciertas funciones de uno, una actividad del otro. Éste es uno de los grandes descubrimientos del Dr. Lefebure.
Otro principio seguido por el autor es el del trabajo sincrónico de una facultad psicológica y de su homólogo físico. ¿Cuál es el homólogo en el organismo de la facultad que llamamos voluntad? La voluntad nos hace actuar. Físicamente, actuamos sobre todo mediante los miembros; en este sentido, podemos decir que los miembros son los homólogos en el cuerpo físico de lo que es la voluntad en el psiquismo. Si queremos desarrollar o formar la voluntad, debemos esforzamos en la realización de los ejercicios de los miembros combinados con la volición.
La respiración rítmica ocupa un lugar preponderante en los procesos de autorregulación. La respiración, una función característica de la vida, que nos une sin interrupción al medio en el que vivimos, es al mismo tiempo la única función de nuestra vida vegetativa sobre la cual nuestra voluntad puede actuar en gran medida. La función respiratoria establece la unión entre nuestra vida de relación y nuestra vida vegetativa, por lo tanto, desempeña un papel esencial en el control del cuerpo.
Los ejercicios mentales combinados con la respiración rítmica permiten a ésta alcanzar su mayor fuerza en la educación del carácter y la inteligencia.
dto.
Nueva explicación del origen de las religiones: el fosfenismo
Los fosfenos son las luces subjetivas, posfosfenos, que persisten en la oscuridad durante tres minutos después de mirar fijamente una lámpara adecuada; el cofosfeno, son los colores que aparecen alrededor de la lámpara si la fijación de la mirada es un poco más prolongada. La mezcla entre los pensamientos y los fosfenos produce efectos pedagógicos maravillosos. Por ejemplo, niños completamente disléxicos leen de forma normal en tres meses, e incluso superan a la media de los niños de su edad. Pero este fenómeno ha sido utilizado instintivamente por todos los pueblos en algún estadio de su evolución, en los cultos solares, que asocian la oración con la fijación de la mirada en el sol. Esto sucede todavía con los zoroástricos, cuyos sacerdotes se llaman «magos». Por lo tanto, la magia, en el sentido original del término, es una ciencia de los fosfenos que se ha perdido.
Los niños pastores tienen la costumbre de jugar con los fosfenos, y mezclarlos con sus plegarias. Los principales hechos de la Iglesia Romana tuvieron como protagonistas a niños pastores. Otros niños utilizan instintivamente el reflejo del sol en el agua. Este fue el caso de la poetisa Minou Drouet, que desde muy joven fue un prodigio. Existen también pescadores que han adquirido cierto don de videncia, rezando mientras trabajaban, con el reflejo del sol en los ojos. Cuando Cristo nació, acudieron pastores y magos, las dos grandes categorías de especialistas en fosfenos de la Antigüedad, y Cristo fue a buscar a cuatro pescadores del lago Tiberíades para comenzar su predicación. Por lo tanto, el Fosfenismo desempeñó un importante papel en el nacimiento del cristianismo. Esto también es cierto para la religión de Mitra, en la que el futuro iniciado debía observar fosfenos en una gruta; los tibetanos también lo utilizaron y poseían en cada templo un libro de interpretaciones de los signos que aparecen cuando se fija la mirada en el sol; los brujos pigmeos miran fijamente una llama para buscar un terreno rico en caza, y sucede a menudo que un explorador que va con ellos tiene la misma visión en el mismo momento, debido a la gran transmisibilidad telepática de los fenómenos fosfénicos.
dto.
Una constante en la historia, la luz
Todas las civilizaciones han hecho un amplio uso de las prácticas de observación fija de fuentes luminosas y, por tanto, de los fosfenos. Estuvo en el origen del poder de numerosos imperios, pero si bien se conocía la importancia de los cultos solares, lunares y de los cultos del fuego, en las civilizaciones antiguas se ignoraba que la esencia de estos "cultos" estaba en la observación fija de la luz. Esto jamás se había evidenciado antes de los trabajos del Doctor LEFEBURE.
Algunos ocultaron estos conocimientos hasta que se perdieron, y todavía en nuestros días, los residuos de estos imperios se perpetúan sobre este impulso milenario que ha dado origen a las religiones y a las tradiciones iniciáticas. En definitiva; si tenemos en cuenta lo que nos enseñan los fosfenos sobre el funcionamiento cerebral, tenemos muchas probabilidades de descubrir nuevas facetas de la historia de la humanidad.
Estas prácticas milenarias no derivan de simples creencias. Los descubrimientos del Doctor LEFEBURE sobre los fosfenos, han puesto de manifiesto, desde 1959, que la luz tiene una influencia extraordinariamente estructurante sobre todas las capacidades cerebrales, y sobre las capacidades intelectuales especialmente.
Esto explicaría que en determinadas épocas, estas prácticas se consideraran como secretas, y fueran aplicadas por las elites dirigentes que intentaban con este "secreto" conservar su poder.
dto.
Desdoblamiento astral
El desdoblamiento no es un fenómeno raro. Se ha practicado en todas las épocas.
Por ejemplo, en la Edad Media, los «brujos» obtenían el desdoblamiento mediante paralizantes bulbares que provocaban un estado de muerte aparente, lo que les permitía penetrar en los «mundos invisibles». Los cátaros y los templarios utilizaban otras técnicas para conseguir el mismo objetivo.
La Iglesia católica desacreditó estas prácticas con el pretexto de la herejía. La Inquisición se encargó de hacer desaparecer a los molestos defensores de estas prácticas.
Sin este encarnizamiento en querer destruir su conocimiento, los fenómenos de desdoblamiento formarían parte de nuestra vida cotidiana. Sin embargo, los niños conocen bien estos fenómenos. Algunos los viven con frecuencia. Pero la mayor parte del tiempo no los escuchamos y los regañamos. No obstante tienen algo que enseñamos, porque sin saberlo conocen perfectamente los medios de producir estos estados maravillosos.
La Escuela del doctor LEFEBURE le ofrece lo que jamás ha sido revelado sobre el desdoblamiento, una facultad natural accesible a todos, común a todos los seres humanos.
dto.
