El gran libro de los seres imaginarios
Un mundo de ilusión, encanto, magia y fantasía se esconde entre las páginas de este maravilloso libro. Los verdaderos protagonistas de las leyendas e historias que se han transmitido durante siglos, de pueblo en pueblo, de generación en generación desde tiempos inmemorables, y han llegado hasta nuestros días, se entrelazan en estas páginas para dar una visión más profunda sobre este espléndido mundo mágico. Hadas, dragones, elfos, enormes monstruos, seres fantásticos, sirenas, zombis, enanos, unicornios, centauros, tritones, gnomos, duendes… son algunas de las misteriosas criaturas que aparecen en este ejemplar de imaginación y fantasía.
dto.
Los secretos de las hadas
Las hadas, pequeños seres fantásticos, encantan la vida cotidiana, velan por nosotros y nos aconsejan sobre lo que debemos hacer para estar en plena forma durante todos los meses del año.
Este bonito libro es un regalo mágico que reúne los sabios consejos de las hadas, quienes cada mes te ofrecen una palabra luminosa para hacer vibrar el alma, una piedra beneficiosa para recargarte de energía, un aceite esencial para curar pequeñas dolencias estacionales, un oligoelemento para reforzar la vitalidad y la salud, así como una lista de las frutas y verduras propias de cada época del año y que te ayudarán a conservarlas.
Así, mes a mes, vivirás mejor bajo la atenta mirada de estas personitas maravillosas. ¡No olvides anotar tus sentimientos, tus pensamientos y progresos en la página correspondiente a cada mes!
dto.
En la imaginación
Cuando escucho el canto de los pájaros y escucho la música que viene del rio, cuando contemplo la palpitante belleza de las flores que embellecen el jardín y veo cómo cada estación se pasea de una forma distinta por él, cuando huelo el perfume profundo de las sierras y las cañadas donde crecen las plantas olorosasy oigo el interminable diálogo entre ellas, cuando me siento contemplándome es esta contemplación y viviéndome en todas estas cosas. Mi espíritu no acierta a desvestirse de ellas y a pensar, ni por un momento, que algún día se vayan del paisaje y dejen solo al hombre.
dto.