«Me comprometo, aquí y ahora, a cambiar mi vibración, cambiando así mi propia historia y la de mi linaje biológico femenino, el cual forma parte del linaje femenino ancestral. Rompo, aquí y ahora, con amor, las viejas barreras de percepción y comprensión para poder comenzar a sentir, pensar y expresarme tal y como yo elijo. Dejo atrás para siempre todo lo que alguna vez pensé y pensaron acerca de quien soy yo. Acepto quien soy yo en realidad, todo lo bueno que merezco y lo que ofrezco al mundo desde mi más pura esencia. Y así es como lo manifiesto, a través de el poder de la palabra. Renuncio, aquí y ahora y para siempre a la necesidad de aprender desde el sufrimiento y el deterioro físico. Sigo adelante, con la intención que acompaña al pensamiento de quien verdaderamente soy». AUTORA Maestra y Mentora de Registros Akáshicos, Guillermina Simó facilita talleres para el Despertar de la conciencia de quien eres. Es la creadora y mentora de Coaching Akáshico . Formada en aaturopatía (APENB, Asociación Española de Naturopatía y Bioterapia), es Maestra de reiki usui tibetano, reiki tradicional japonés y karuna desde 2008. Es asimismo creadora de Medicina Vibracional con Flores de Bach (Terapia floral para la sanación del Linaje Ancestral Femenino)

El profundo anhelo de encontrar al alma gemela reside en lo más profundo de nuestro ser, especialmente para aquellos con una sincera dedicación al camino espiritual o aquellos que se identifican como semillas estelares. De hecho, la humanidad ha tenido un corazón roto durante siglos por la ilusión de la pérdida del Amado. De dónde proviene ese anhelo, qué significa y cómo satisfacerlo son preguntas eternas que hasta ahora habían quedado sin respuesta.

La Unión de Almas Gemelas desentraña el misterio del insaciable anhelo por el Amado e ilumina el camino para encontrarlo. El retorno del Amado no es entregar tu poder, hacer que el “otro” sea más importante que tú, esperar que el otro cumpla tu fantasía del Amado. La fusión atómica de la Llama Gemela se encuentra en el camino del despertar, donde sanamos los aspectos fragmentados en nosotros mismos. A medida que sanamos la fragmentación dentro de nosotros mismos, volviendo cada vez más a un estado de totalidad, finalmente podemos atraer a “otro” que sea capaz de reflejarnos esa totalidad.