Dormir es uno de los aspectos más importantes pero menos comprendidos de nuestra vida. Hasta hace muy poco, la ciencia no tenía respuesta a la pregunta de por qué dormimos, para qué sirve el sueño o por qué sufrimos consecuencias devastadoras para la salud cuando está ausente. El preeminente neurocientífico y experto en sueño Matthew Walker propone una deslumbrante inmersión en el propósito y el poder del sueño, y nos explica cómo un buen sueño nocturno puede hacernos más inteligentes, más atractivos, más felices, más saludables e incluso prevenir el cáncer. Dentro del cerebro, el sueño enriquece una diversidad de funciones, como nuestra capacidad para aprender, memorizar y tomar decisiones lógicas. Recalibra nuestras emociones, reafirma nuestro sistema inmunológico, afina nuestro metabolismo y regula nuestro apetito. Soñar crea un espacio de realidad virtual en el que el cerebro combina el conocimiento pasado y presente con gran creatividad. Walker ofrece una exploración revolucionaria del sueño, examinando cómo afecta cada aspecto de nuestro bienestar físico y mental. Describe los descubrimientos científicos más avanzados y las décadas de investigación y práctica clínica, y explica cómo podemos aprovechar el sueño para mejorar el aprendizaje, el estado de ánimo y los niveles de energía, regular las hormonas, prevenir el cáncer, el alzhéimer y la diabetes, reducir los efectos del envejecimiento y aumentar la longevidad.

Sus innovadores ejercicios de salud cerebral, explicados paso a paso, impulsarán tu crecimiento personal de forma inaudita. Te ayudarán, por ejemplo, a controlar tus emociones, a activar el foco atencional, a deshacerte de las cargas mentales que te anulan y a comprender qué te hace sufrir para liberarte de ello.

Descubre cómo paliar los tics nerviosos que provoca el uso de la tecnología, cómo identificar tu modelo de aprendizaje y qué mecanismos de retención de información puedes usar. Encuentra herramientas para superar el duelo de forma que tu mente entienda lo que sucede, comprende la importancia de la sonrisa, el poder de un abrazo y la necesidad de llorar.

Este libro se convertirá en la guía a la que todos vamos a acudir para aprender a cuidar nuestro cerebro de manera adecuada y dotarlo de una magnifica salud a lo largo de nuestra vida.

La importancia del contacto piel con piel, del contacto físico como expresión de emociones y de cómo su base es primordialmente biológica son los temas centrales de este libro. No hacemos más que comportarnos como los animales que somos, expresando nuestros principios más elementales, que tienen una visión física, química en el cerebro, de redes neuronales que ya vamos conociendo bien. Porque si no nos podemos tocar, ¿para que un cuerpo? ¿Para que, si nadie te toca, nadie te huele, nadie está tan cerca como para escuchar el latido de tu corazón o ver los cambios de tu piel cuando te da la brisa? ¿Que más da comer o no comer cuando hacerlo ya no es compartir ni rituales ni placeres ni animadas conversaciones alrededor de una mesa? Desde una perspectiva neurocientífica, el presente ensayo trata sobre la importancia primordial del contacto piel con piel, su papel en la expresión de las emociones y de la relación interpersonal. El autor realza la importancia de la neurobiología para entendernos como especie.

Tu cerebro te ofrece un servicio extraordinario e irrepetible. La disponibilidad simultánea de un sistema sensorial para la percepción del entorno, de un sistema nervioso para el control del aparato motor, así como de una conciencia integrada para discernir y decidir, te otorgarán años de existencia continua. Este manual, como el de cualquier otro producto, no mira ni al pasado lejano de nuestra ignorancia ni al futuro lejano de un conocimiento que hoy resulta inescrutable. Trata, en cambio, de lo que realmente se puede hacer con un cerebro humano en el presente: es decir, mucho, mucho más de lo que piensas. Los avances de la tecnología, pero tambien la extraordinaria cantidad de descubrimientos de los últimos veinte años, confirman cada día la intuición de Santiago Ramón y Cajal, uno de los padres de la neurociencia: 'Todo ser humano, si se inclina a hacerlo, puede ser el escultor de su propio cerebro'. Es bueno que tu cerebro, como el de cualquier otro usuario, sepa cómo y por que.