Somos co-creadores de nuestra propia realidad: los pensamientos, emociones, creencias y sentimientos existentes, determinan la percepción de nuestra vida. La glándula pineal corresponde a uno de los centros principales de nuestro cuerpo, es el eje creador, que tiene como misión, entre otras cosas, abrir el camino de la recuperación de las potencias originales del ser y conectar con los campos de creación superior, encuentra el 100% de las capacidades reales del universo. El método de activación interna de la glándula pineal influye en aspectos tanto cognitivos y emocionales como fisiológicos y circunstanciales. Como un método integral, abarca diversos aspectos: la conjugación de nuestras partes racional, física, emocional y espiritual.

Le invitamos, querido lector, a un recorrido por la evolución del concepto de energía en relación a los seres

vivos, con el mundo de la salud como paisaje de fondo, sin tabúes, prejuicios ni complejos. Hablaremos de

biología molecular y de ciencia evolutiva; hablaremos de bioquímica, sin duda; pero también de biofísica, de

magnetismo y de esoterismo.

Todo ello en términos comprensibles y aprovechables por el lector medio. Haremos una recapitulación de la imagen que tenemos de la vida, del universo y de la salud en nuestro marco cultural. Repasaremos los experimentos científicos claves que deberían haber marcado una época y que lo hicieron sin duda, pero que no han trascendido a nuestras escuelas, a nuestras universidades, a nuestros periódicos, en parte por nuestra insistencia en permanecer aletargados, y en parte también por intereses que se alimentan de vendernos la anestesia. Veremos que, tras este repaso, se dibuja claramente la sólida base filosófica y científica sobre la que se asientan las «nuevas» (y a la vez milenaria) y pujantes formas de entender y practicar la salud.

Actualmente, uno de cada cuatro adultos muere innecesariamente de una de las siete enfermedades mortales. Quizás esto se deba a una falta de educación holística, o quizás, simplemente, les haya llegado su hora. En el último caso, ¿se podría optar legítimamente por la eutanasia siguiendo el método legado por los lamas? ¿En qué consiste este método? ¿Cómo se sabe si es el momento de partir o si se trata solamente de un desafío vital? ¿Y qué ocurre con la curación espontánea o la operada por los sanadores?