En este segundo volumen de El Secreto Ancestral de la Flor de la Vida, Drunvalo explora en mayor profundidad el sagrado patrón de la Flor de la Vida, que es el generador geométrico de todas las formas.

Las proporciones del cuerpo humano; los matices de la conciencia; los tamaños y distancias entre estrellas, planetas y lunas: todos ellos reflejan sus orígenes en este hermoso mándala. El aparentemente sencillo diseño de la Flor contiene el génesis de nuestra entera existencia multidimensional.

Drunvalo presenta las energías que configuran nuestro mundo y nos conduce a través de un relato de ciencia, lógica y coincidencias por un sendero en que recordamos de dónde venimos y quiénes somos.

En estas páginas comparte además las instrucciones para la meditación Mer-Ka-Ba, que ejecutadas correctamente conforman las claves para la ascención a los siguientes niveles dimensionales.

Acompaña a Drunvalo en sus relatos sorprendentes y misterios revelados, e indaga en los Secretos Ancestrales de la Flor de la Vida.

−¿Es la Tierra una esfera?−
Para las civilizaciones del “Mundo Antiguo”, no. La −cosmología− de las antiguas civilizaciones se basa en una “Tierra Plana”, con forma de disco y estacionaria. Es decir, para egipcios; mayas; incas; toltecas; aztecas; nórdicos o vedas, entre otros, o para aquellas civilizaciones que dejaron restos de una arquitectura y de un conocimiento astronómico extraordinario, la Tierra, no es esférica.
Este tratado recoge las ecuaciones astronómicas y la geometría que, sintetiza la astronomía antigua, y como prueba de ello, se revela la matriz fundacional del “Rectángulo Solsticial” utilizado por los “Maestros Constructores”, y su relación con el mapa planisferio de la Tierra Plana, encriptado de manera geométrica, en la triangulación de las tres grandes pirámides de Guiza, en Egipto.
Un conocimiento suficiente, como para formalizar una hipótesis científica sobre una Tierra Plana y estacionaria.
«La realidad está siempre ahí, ante ti, lista para ser aceptada, pero antes debes estar dispuesto a juzgar la irrealidad, como lo que es.»
Iván Paíno.

Geometría Sagrada. Bases naturales, científicas y pitagóricas.

La Geometría Sagrada, como expresión del Plan Divino manifestado en el mundo físico, busca descifrar el lenguaje común a través del cual se expresa el macrocosmos y el microcosmos. Uno de sus principios básicos lo encontramos en la máxima hermética “como es arriba, así es abajo”, lo que implica necesariamente que el universo manifestado, sus leyes y estructuras, se reflejan en la propia constitución del ser humano. Se establece con ello una relación palpable entre la creación universal y la creación humana, haciendo que esta adquiera un sentido trascendente, esto es, un sentido sagrado. Vinculadas a la Geometría Sagrada encontramos las doctrinas pitagóricas. La base numérico-metafísica pitagórica se encuentra reflejada en los diez primeros números y sus asociaciones geométricas, pues los diez primeros números se consideraban elementos seminales de todos los principios del cosmos.