D. Didier, autora de numerosas obras sobre energética, es la inventora de la Telurología.

Esta ciencia nace de la reflexión y de la evidencia. Nos permite acceder a la comprensión de los fenómenos que regulan la tierra y el conjunto de sus reinos.

Muchos años de experimentación sobre lugares telúricos y en zonas del globo especialmente vibratorias, han permitido a d. Didier identificar las influencias energéticas y telúricas procedentes del corazón de nuestro planeta. Así nace la rueda telurológica con sus cuatro elipses, representación virtual de estas influencias.

Este conocimiento permite la interpretación de temas personales o colectivos.

S. Dufour, ingeniero y astrólogo, trabaja en el ámbito energético desde hace una veintena de años; inicialmente se apasionó por la astrología y posteriormente por la telurología, en la cual ha encontrado un complemento natural a la anterior.

¿Cuántas veces nos encontramos relacionados con el pasado que incita a pautas ya familiares pero destructivas? ¿Cuántas veces hemos intentado analizar una relación poco conveniente o infeliz desde una perspectiva psicológica, sólo para ver que este tipo de interpretación no nos satisface? Martin Schulman sugiere que podemos alcanzar una comprensión profunda y constructiva si encontramos las bases kármicas en nuestras relaciones, en aquellas actitudes, conductas y creencias que son residuos de vidas anteriores y que permanecen en el camino de nuestra armonía y equilibrio, siendo los requisitos previos para una relación perdurable.
Martin Schulman considera las relaciones mutuas entre planetas bajo una perspectiva kármica. Compara todas las combinaciones posibles del aspecto dominante, mostrando al lector cada una de las facetas de la personalidad representadas por un planeta con respecto a los planetas del tema natal de su pareja. ¿Dónde están los puntos de conflicto en su relación dentro de la pareja? ¿Cuáles son las lecciones que deben aprenderse como resultado de esta relación, y cuál es el camino más correcto para aprenderlas? Revisando nuestras relaciones desde una perspectiva kármica podemos crecer juntos espiritualmente y emocionalmente. Schulman nos ofrece nuevos utensilios que nos ayudan a permanecer en la vía del amor creativo, encantador, permanente.

Luminar significa fuente de luz, pero en una extensión de su significado, el término alude también a personas de talento capaces de formular aquellos preceptos con los que nos identificamos. Este concepto, en la astrología psicológica arquetípica, se traduce en la figura de los maestros interiores. En el origen del ser humano, la madre, o sea, la Luna, constituye nuestra primera guía interna. Ella nos proporciona la seguridad que otorgan el apego emocional y la confianza en la vida; la Luna también nos proporciona el primer modelo del cuidado de uno mismo. Por su lado, el Sol, nos hace enfrentarnos a la ansiedad, el peligro y la soledad, pero también nos induce a instruirnos, por eso es precisamente este Luminar, el Sol, quien ha generado los adelantes sociales y tecnológicos de la cultura occidental.

El Sol y la Luna, los luminares, simbolizan dos procesos psicológicos básicos, pero diferentes, que operan en cada ser humano. Liz Greene y Howard Sasportas nos invitan a explorar el contenido simbólico de nuestros propios luminares para poder así conocernos, dar un sentido a nuestra vida y encontrar un equilibrio entre estas dos energías.

Si el Universo es una proyección de nuestro interior y el horóscopo un símbolo de nuestro potencial, la colección Nuevas Tendencias en Astrología se propone explorar el movimiento de los cuerpos celestes para encontrar las claves del comportamiento humano, devolviendo a la Astrología su significado primordial de instrumento del conocimiento.