A medida que se incrementa y acelera el ritmo de nuestra sociedad, la necesidad de relajarnos, evadirnos y encontrar armonía en nuestra vida se hace cada vez más imperiosa. Las enseñanzas y técnicas de meditación de este libro están diseñadas para todos aquellos que consideran que el tiempo es precioso, y para quienes la vida se ha convertido más en una lucha que en una celebración.
Los métodos exclusivos y la sabiduría que se presentan se dirigen a la conexión entre la tensión mental y la tensión física, y muestran cómo usar este vínculo para alcanzar la conciencia superior y una relajación más profunda.
Compilado de las enseñanzas de Osho, Meditación para gente ocupada te capacita para redescubrir tu yo interno, abrirte al mundo real y experimentar una vida más plena y menos estresada.

OSHO es uno de los grandes maestros espirituales del siglo XX. Su enfoque único de la meditación tiene en cuenta el paso acelerado de la vida actual, y sus métodos se dirigen a liberar de tensiones el cuerpo y la mente con el fin de poder experimentar plenamente el estado meditativo. Su vida y enseñanzas han influido a millones de personas de todas las edades y condiciones.
El Osho International Meditation Resort, que Osho estableció en Puna (India), es un oasis donde sus enseñanzas pueden ser puestas en práctica y que cada año continúa atrayendo a más de 15.000 visitantes de todo el mundo para participar en las técnicas que constituyeron el núcleo de sus enseñanzas durante más de veinte años.

El ego es justo lo contrario de nuestro verdadero ser. No es ese sustrato de nuestra existencia en el que nos reconocemos, sino una falsa identidad que adoptamos en nuestro proceso de socialización precisamente para que, reflexionando sobre lo accesorio, no nos planteemos preguntas sobre lo verdadero. El ego es un envoltorio de nuestra conciencia y, a menos que nos liberemos de el, jamás llegaremos a conocernos.

Al ser un engaño, el ego rehúye lo sencillo, pues lo delata; lo difícil sí es un reto para el, y lo imposible un reto de verdad. Así pues, cuanto mayor sea el reto que aceptemos, mayor será el ego que estamos construyendo en nosotros mismos: es nuestra ambición la que dará la medida de nuestro ego, que es tambien la medida de nuestro fracaso.

Nietzsche dijo «Dios ha muerto», convencido de que esa muerte suponía una liberación para el hombre. Sin Dios, el hombre será capaz de hacer cualquier cosa. No habrá quien le juzgue Ahora bien, si Dios desaparece y el hombre se queda vacío, ¿cómo utilizará su libertad de forma creativa y responsable?

En esta obra Osho habla sobre la sentencia de Nietzsche y del malentendido que provocó. Osho va un paso más allá y afirma que Dios nunca existió, aunque eso no signifique que la vida no tenga una dimensión espiritual. y la puerta de entrada a esa dimensión es la meditación, donde uno encuentra la llave para lograr una auténtica libertad.

Este libro -que recoge una de sus últimas series de conferencias- destaca sobre el resto de su obra por su fuerza e intensidad. Osho coloca las últimas piezas de un puzzle que ha construido durante treinta y cinco años, y nos presenta su radical aportación en la búsqueda individual del sentido de la vida.