Buenos ciudadanos : hacia la creación de una sociedad más ética
Buenos ciudadanos : hacia la creación de una sociedad más ética
- EAN: 9788497546430
- ISBN: 9788497546430
- Editorial: Ediciones Oniro, S.A.
- Año de la edición: 2013
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 140 X 210 mm.
- Páginas: 128
(0 Comentarios)
Comenta y valora este libro
Disponible 48/72 hoas
Descripción
Buenos ciudadanos : hacia la creación de una sociedad más ética
Otros libros de Budismo Zen
La práctiza del zen : introducción a la antigua tradición del budismo ch'an
Con numerosas citas extraídas de textos chinos originales La práctica del Zen es una introducción sobresaliente a la tradición china del budismo Chan (Zen en japonés).
El profesor Chang aborda el concepto koan, narra las vidas de diversos maestros Zen de la antigua China y hace una introducción esclarecedora de la filosofía clásica budista que subyace en el Zen.
GARMA C. C. CHANG nació en China en 1920.
De joven estudió y practicó el Zen en un monasterio de Nanking. Más tarde, su interés por todas las tradiciones budistas le llevó a ingresar en el monasterio de Gongka, en el Tíbet oriental, donde pasó 8 años.
En 1948 Chang decidió marcharse a vivir a Estados Unidos. Con el apoyo de la Bollingen Foundation empezó su trabajo de traducción e investigación de textos budistas. Más tarde ejerció como profesor de budismo en el Departamento de Estudios Religiosos de la Universidad de Pennsylvania.
Sus conocimientos profundos de la tradición china del Zen y de la tradición tántrica del budismo tibetano le convirtieron en un practicante y erudito singular reconocido mundialmente.
Entre sus obras destacan su célebre traducción al inglés de los Cien mil cantos de Milarepa (Hundred Thousand Songs of Milarepa, Shambhala Publications, USA) y su traducción y estudio del Avatamsaka sutra. El profesor Chang falleció el 25 de mayo de 1988 en EE.UU.
dto.
Concentración y contemplación
Aunque basado en enseñanzas milenarias de los lamas tibetanos, Concentración y Contemplación está escrito desde una perspectiva actual, tan rigurosa con el pasado y la tradición como libre de las influencias culturales y abierto a las necesidades y situaciones del mundo contemporáneo.
“Durante los últimos años, Occidente ha visto crecer considerablemente el interés por el budismo. El atractivo de una antiquísima civilización con rituales mágico-místicos hace que muchas personas se acerquen a él buscando una salida a los problemas de la sociedad moderna industrializada. Por otro lado, vienen lamas de Nepal y de la India a Occidente, que con sus mejores intenciones, y presuponiendo que la naturaleza humana es idéntica en todas partes, dan enseñanzas e iniciaciones sin tener en cuenta las diferencias de mentalidad y las necesidades y dificultades de los occidentales con respecto de los tibetanos. Desgraciadamente, la manera tradicional tibetana de enseñar y practicar el budismo no es la más fácil ni la que mejor se adapta sin más a la mentalidad de los occidentales, a pesar del supuesto gran entusiasmo que muestran. Así, en los últimos años continuamente he conocido a personas que, aún habiendo sacrificado muchos años en el budismo, realmente no han echado raíces en él.
La práctica del darma (la enseñanza budista) siempre tiene que corresponderse con el desarrollo de la propia mente, porque si no simplemente no funciona. Mucha gente en Occidente, al comienzo de su práctica budista desea meditar enseguida en las llamadas “deidades”, hacer pujas (ceremonias) y realizar rituales. Esto es casi siempre una señal de que se han dejado seducir por cosas externas y ven el budismo como algo fascinante, algo maravillosamente exótico, identificándolo con atracciones externas, como las largas trompetas de la música ritual tibetana”.
dto.
Crisis y solución : unión de opuestos
El conflicto, ya sea interno u externo, está arraigado en todas las formas de vida. Si lo enfocamos de manera positiva, veremos en él un motivo de aprendizaje, una excusa par ejercitar nuestra sabiduría y una experiencia en la que volcar lo mejor de nosotros mismos. Gestionando los conflictos con rectitud y con tino tan pronto como se produzcan, conseguiremos sin duda convertirnos en seres humanos plena y armónicamente desarrollados.
Dado que el conflicto es parte integrante de la vida, es lógico que nos veamos involucrados periódicamente en algún tipo de crisis. Pero eso no quiere decir que debamos convertirnos en víctimas de estas situaciones. Al contrario, debemos darles la bienvenida puesto que nos brindan la oportunidad instantánea de echarle una ojeada crítica a nuestro momento vital, así como de investigar la naturaleza intrínseca de cualquier conflicto. Si adoptamos esta actitud, no nos perderemos una sola ocasión de crecer y de avanzar hacia la plenitud durante el transcurso de nuestras vidas.
Dhiravamsa
dto.