0bras como El Grimorio del papa Honorio cobran una importancia notable para el estudioso de las tradiciones mágicas occidentales. En esta obra aparecen muchas de las raíces del sistema mitológico que, en su mayor parte, todavía imperan en estos tiempos. Un estudio profundo de esta obra, puede extraer las aguas del pozo profundo del sistema límbico de nuestra cultura, sus miedos y sus creencias. Con esto pretendemos decir que, mediante esta clase de libros, se podría hacer un rastreo que explicase la mentalidad mágica de otras épocas, mentalidad que, por supuesto, todavía hoy tiene una presencia, aunque débil.

ESTE LIBRO CONTIENE UN EXTENSO VOCABULARIO DE PALABRAS QUE SE USAN EN LA SANTERÍA
Descripcion en espanol: La religión yoruba tiene sus orígenes en la tribu del mismo nombre, que duró aproximadamente doce siglos. El tráfico de esclavos permitió que sus habitantes fueran transportados a América, a donde llevaron su religión, que se fundió con el catolicismo para dar lugar a otro de sus nombres: santería.. Actualmente es un credo con un gran número de devotos, por lo cual surge este libro, que presenta un glosario de términos yoruba, con cientos de palabras y frases religiosas y folcloricas.

La bruja y la brujería son una referencia fundamental dentro del folclore español y europeo. Dentro del imaginario colectivo, su figura se equipara con siniestros personajes, adoradores del diablo, que, con sus malas artes, arrastran a las comunidades al infortunio. Pero ¿qué hay de verdad detrás de esta representación?

Enrique Echazarra nos propone una visión renovadora del fenómeno de la brujería que desde el análisis histórico, antropológico y cultural revela cuales son las raíces detrás esta representación sesgada e interesada de una serie de personas, principalmente mujeres, que cuyo único y verdadero pecado muchas veces fue desafiar el orden imperante.

"Crónicas de Brujería" es un libro riguroso y bien documentado que recoge hechos históricos, tradiciones y leyendas para mostrarnos como instituciones, principalmente el Santo Oficio y la Inquisición, trataron de soterrar un legado pagano que, aún en nuestros días, podemos vislumbrar