Paracelso, indudablemente, fue alguien sobresaliente en su época: la época del siglo XVI, cuando toda la ciencia médica dormitaba canturreando los oráculos de Avicena y de Galeno. Médico y Alquimista a la vez, se alza contra ciertas leyes establecidas en los libros médicos de los griegos y de los árabes. Su filosofía destila a través del lenguaje vulgar, un lenguaje dirigido a sus enfermos y clientes, pasmados ante su difícil saber.

Las teorías de Paracelso, por muy extrañas y vulgares que parezcan, adquieren casi su óptimo grado de lucidez, a tenor de los tiempos durante los cuales vivió.

Paracelso poseía un gran poder magnético y se vanagloriaba en conocer la universalidad de las leyes astrológicas, este tándem de conocimientos le procuraba la absoluta confianza de sus enfermos

El Corpus Herméticum aparece como una colección de textos atribuidos a Hermes Trismegisto, que forman el núcleo doctrinal de esa corriente de pensamiento que conocemos como "hermetismo". EStamos ante textos de carácter iniciático; se presentan como medios para alcanzar la revelación de un conocimiento superior -la gnosis, que procede de la divinidad y a ella conduce. Estos tratados, de títulos ciertamente sugerentes, versan sobre todo aquello que, en los primeros siglos de nuestra era, se  creía acerca de Dios y los dioses; del universo y del mundo; del alma de la materia; del conocimiento y del error y, esencialmente, de cuanto conduce al esclarecimiento de la verdadera condición humana. La presente edición, a cargo de uno de los más destacados estudiosos del hermetismo, J. García Font, ofrece al lector una cuidada versión, no solo en la forma ?interpretación filológica y referencia comparativa con otras versiones, sino también por lo que respecta a notas y comentarios sobre la filosofía del contenido

El Reino de lo Misterioso, es un campo abierto a las conquistas de la Inteligencia.

Todos los temas actualmente en debate ya habían sido resueltos por los antiguos. Antes siquiera de la inauguración de nuestros anales, sus soluciones, escritas en jeroglíficos, habían perdido todo sentido para nosotros.

Eliphas Levi ha vuelto ha descifrar la Clave; ha abierto los cementerios de la ciencia antigua, ofreciendo a su época todo un universo de teoremas olvidados, de síntesis tan simples y sublimes como la propia naturaleza, que nacen siempre de la unidad y se multiplican como números de proporciones tan exactas que lo conocido demuestra y revela a lo desconocido.

Misterios de otros mundos, fuerzas ocultas, revelaciones extrañas, enfermedades misteriosas, facultades extraordinarias, espíritus, apariciones, paradojas mágicas, arcanos herméticos... de todo hablaremos y todo lo explicaremos