Este libro no sólo contiene indicaciones para una mayor información sobre los movimientos rosacruces clásicos y modernos, sino que además es un nuevo llamamiento a profundizar en el significado de los Manifiestos Rosacruces y en su propuesta de reforma espiritual según el cuerpo, el alma y la mente.

En el transcurso de apenas dos siglos, las enseñanzas del catarismo promovieron una total reforma del cristianismo. Una reforma concebida como la posibilidad real de un renacimiento espiritual del ser humano a través de una práctica de vida verdaderamente apostólica y evangélica, llevada a cabo con plena libertad de conciencia y en completa autonomía personal, algo inconcebible para la mentalidad de aquellos tiempos.

La singularidad de esta propuesta se enfrentaba de lleno con la reforma gregoriana católica, basada en la institucionalización de los sacramentos y en la consolidación de la jerarquía eclesiástica como única intérprete de las Sagradas Escrituras y detentadora del dogma.

Esta obra intenta aunar el rigor de las fuentes documentales con la sencillez de la divulgación. Pretende entreabrir una puerta y avivar la inspiración hacia otras formas de entender la historia de este pensamiento reformista medieval.

El sentido de la vida, su continuidad, qué hay detrás y después de nuestra existencia son algunos de los interrogantes que Juan Francisco trata de responder a lo largo de estas páginas.

Con un tono sencillo y cercano, el autor hace un recorrido por su vida, desde la infancia a la madurez, describiendo con detalle las experiencias místicas que más han marcado su sendero Espiritual.

"Doy al caminante mi camino recorrido", un camino místico hacia su propio despertar que tal vez ayude a otros a encontrarse, pues conocerse a uno mismo es conocer la Verdad.