onjuntivitis, sinusitis, bronquitis, reumatismos, dolor de espalda, ciática, tendinitis, cistitis, alergias… La lista y variedad de enfermedades inflamatorias es casi infinita, por algo los antiinflamatorios son los medicamentos más vendidos en las farmacias. Sin embargo, los potentes fármacos destinados al tratamiento de las reacciones inflamatorias presentan numerosas contraindicaciones, a veces peores que la misma enfermedad. La naturaleza nos ofrece una solución: plantas medicinales que nos permiten elaborar remedios naturales sin efectos secundarios (garra del diablo, albahaca, cúrcuma, reina de los prados, própolis, etcétera). Esta práctica guía, elaborada por el prestigioso naturópata suizo Christopher Vasey, nos detalla una amplia selección de plantas medicinales y productos a base de omega 3 con extraordinarios efectos antiinflamatorios, acompañada de la correspondiente posología y modo de empleo. «La naturaleza nos ofrece un amplio abanico de plantas medicinales, así como otros remedios de acción antiinflamatoria, con la gran ventaja de que no provocan ningún efecto secundario nefasto». AUTOR naturópata residente en Suiza, es autor de un gran número de obras muy significativas por sus aportaciones a la naturopatía y por su labor dinamizadora de la parte teórica de esta ciencia, lo cual ha contribuido en gran medida a renovar y enriquecer el panorama naturopático actual. Sus libros, traducidos a varios idiomas, se sitúan en los primeros puestos de las listas de ventas de Estados Unidos y Alemania.

Esta obra contiene las valiosas y útiles recetas de Fray Anselmo, quién de modo muy fácil y práctico le irá indicando la manera tradicional de curar todo tipo de enfermedades y dolencias por métodos tradicionales, al valor práctico de esta obra hay que añadirle su gran valor documental, ya que nos hayamos ante un clásico de gran difusión desde el siglo XVI.

Según las cifras, el Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es una enfermedad crónica que afecta a millones de niños y con frecuencia persiste en la edad adulta. Se trataría de una combinación de problemas, como la dificultad para mantener la atención, hiperactividad y comportamiento impulsivo. Vistas estas cifras entendemos que ahora se estén medicando millones de personas, pero la crítica surge cuando la medicina tradicional reconoce no tener solución definitiva, solamente paliativa. Para aumentar aún más la preocupación de los padres y los adultos afectados, se insiste en que estos trastornos ocasionan baja autoestima, relaciones conflictivas y malos resultados en la escuela y el trabajo. Vistos estos problemas, es razonable enten¬der la necesidad de los millones de afectados para acudir al médico. Además, algunas personas parecen no superar nunca totalmente los síntomas del TDAH y el tratamiento químico se hace crónico. Este libro aporta soluciones inocuas que son bastante más que una simple alternativa.

Numerosos estudios científicos demuestran de manera incontestable que nuestro intestino y su equilibrio permanente son las bases de nuestra salud y vitalidad. A través de unos buenos hábitos y de una rutina de higiene intestinal ayudaremos a nuestro intestino a reequilibrarse, encontrar la armonía y hacer que nos sintamos y estemos mejor día tras día.

El intestino, ese órgano hasta hace poco desconocido, ha adquirido en los últimos años una importancia capital. Y no es para menos, pues es elresponsable directo de muchas patologías, no solo las que son propias del aparato digestivo (gases, hinchazón, estreñimiento...), pues también está detrás dealergias,sobrepeso o depresiones. Y es que el intestino es un órgano complejísimo que alberga, por ejemplo, ¡el 90%! de laserotonina-la hormona del bienestar- que producimos, pero también una estructura de neuronas digestivas tan compleja y necesaria como la del propio cerebro.

En cuida tu intestino Christian Brun, reconocido naturópata francés, nos explica de una forma clara y no exenta de humor por qué el ser humano es un todo indivisible: aunque sea primordial, nuestra salud no depende solamente de lo que comemos, sino también de cómo respiramos, cómo nos movemos...