El duelo adopta muchas formas. Puedes estar afligido por el fallecimiento de un ser querido, por una relación sentimental que ha terminado, o incluso por un lugar al que solías ir y que ya no existe o ha cambiado. También puedes enfrentarte a otro tipo de pérdida: el sentido de quién eres y cómo puedes vivir tu vida en un mundo cada vez más incierto y cambiante. Esta reconfortante guía te ayudará a curar el dolor de la pérdida y a avanzar en la vida con un sentido y un propósito renovados. En este libro aprenderás a crear un santuario seguro para tu dolor, de modo que puedas honrar tus sentimientos y darles el espacio que merecen. También descubrirás formas de crear una red de apoyo, dar voz a tu herida y superarla ayudando a los demás. Esta reconfortante guía incluye herramientas sencillas que te ayudarán a:* Identificar las cosas que realmente importan.* Honrar tu dolor.* Dar prioridad a tu salud mental y a tu autocuidado.* Aprender y crecer a partir de tu pérdida.

Cuando nos acercamos al dolor de otra persona observamos cómo la desesperanza anida en su corazón y hace temblar todo su ser. Ayudar, sostener al otro en su dolor, en su herida, es proporcionarle esperanza. Es acompañar y sostener su malestar.

¿Cómo podemos hacerlo sin caer en la arrogancia del que se cree libre de sus propias heridas? Al acercarnos a las heridas del otro desde el rol de sanador, habremos de reconocer y saber de nuestras propias heridas. Ello implica un viaje interior al encuentro de nuestro dolor, sobre todo aquello escondido en las sombras de nuestro desamor, en aras de activar nuestro sanador herido.
Más aún, cuando tenemos que hacer frente a la muerte, bien acompañando al moribundo a transitar la aceptación de su finitud, bien a la familia, favoreciendo el duelo ante la pérdida, ¿cómo conseguirlo sin haber hecho frente a nuestra propia muerte? ¿A la muerte que anida tras nuestra heridas no reconocidas?
Este libro es una invitación a reflexionar sobre este morir intimo a través del conocimiento que nos proporcionan la mitología y la antropología, en un viaje que nos lleve del inframundo a la esperanza.

A los que lloran la muerte de un ser querido