La luz de la esperanza
Hay dos significados de la palabra “esperanza”, uno es el latino: esperar; y otro es el griego: expandir, por lo que “La Luz de la Esperanza” es tanto lo que esperas de esta vida, como lo que haces para expandirla como camino de mejora y superación. Janice no es amiga de jerarquías, apegos o dependencias, por eso te ofrece, a lo largo y a lo ancho de este libro, liberación, crecimiento, independencia y consciencia de tu ser interno, es decir, Janice Wicka te invita a que seas un ser consciente y responsable de sus virtudes y sus defectos, único e irrepetible, que camina junto a sus hermanos de luz hacia la Verdad por el camino de la Esperanza. Janice Wicka (McAllen, Texas, 1964), reside actualmente en Zihuatanejo, Guerrero, México, lo más apegada a la Naturaleza posible, con sus hierbas mágicas y sus sueños lúcidos, sus númenes y sus musas, poniendo el foco en “La Luz de la Esperanza” de un mundo siempre más rico, sano y mejor.
dto.
Magia blanca
Janice Wicka, con su natural lucidez y alegría, nos presenta una magia blanca llena de luz y optimismo, con rituales de amor y de riqueza, pero también con sabios consejos para esta Nueva Era en donde muchos de los prejuicios del pasado se van superando, “y la humanidad está despertando y avanzando a pesar de los pesares.” La magia blanca es luz y poder de la sacrosanta madre naturaleza, simple, sencilla y llena de posibilidades, porque partimos del maravilloso milagro de ser y estar aquí y ahora en este hermoso planeta, con todo al alcance de la mano por más que nos compliquemos la existencia a nosotros mismos. Janice no niega las tradiciones ni los rituales, es más, en este libro nos los enseña, pero a la vez nos pide que elevemos cada día nuestra conciencia hasta que comprendamos que todos y cada uno de nosotros somos magia pura.
dto.
Hierbas mágicas : la magia de las hierbas está al alcance de su mano, aprenda a utilizarlas en su fa
Lo bueno de las Hierbas Mágicas, nos relata Janice Wicka, es que las tenemos al alcance de la mano, ya sea en nuestros propios jardines o en el mercado más cercano, y sus resultados son maravillosos tanto en el campo de la salud como en el campo de la magia.
Ruda, romero y lavanda, por ejemplo, limpian por dentro y por fuera tanto a las personas como a las casas, alejando los males y atrayendo la abundancia. Las recetas para conseguirlo son sencillas y directas.
Por supuesto, hay hierbas que es mejor no tratar si no es de modo profesional o bajo supervisión, como la belladona, la mandrágora o la ayahuasca, y no porque sean hierbas malignas o del Diablo, sino por sus efectos y su toxicidad.
La magia de las hierbas está al alcance de su mano, aprenda fácilmente a utilizarlas en su favor y bienestar.
dto.