Este libro nos sumerge en su significado más profundo, su simbolismo, explorando lo que representa cada una de estas figuras en las que seguramente infinidad de mujeres podrán verse reflejadas. Hablaremos de pactos secretos, manzanas envenenadas, maldiciones subliminales y el sueño letárgico de una vida sin amor, sin obviar la figura infaltable de todas estas leyendas, el Príncipe Azul. Es el hombre perfecto, autor del beso que contiene todos los antígenos, todas las pócimas antivirales capaces de devolver la vida a las que dormitamos alguna vez, sin poder despertar. El Ser madre, hermana, musa inspiradora, amante, cuidadora del mundo nuevo, romántica, plena, sublimada y pura... ¡Descúbrete Mujer Desobediente!

Mujeres que brillan es un acto de amor, un regalo del cielo, para nosotras. Eila, experimentó su despertar espiritual con más fuerza en la edad adulta. Te inspira a través de su historia a amarte, reconocerte y escucharte, para comenzar a ser tú. Esta guía te llevará a donde necesites en este momento, más allá de las limitaciones que estés experimentando.

Su sentido, es universal y es un mensaje de amor incondicional. Ya somos todo lo que buscamos, desde el mismo instante que salimos de la fuente y somos guiadas. Al leer este libro te encontrarás en otra frecuencia, transformando tu vida.

Cada vez que lo leas habrá una parte de ti para la que ya estés lista. ¡Ha llegado a tus manos porque has escuchado tu llamado! 

Disfrutar de la vida no es algo que venga dado, sino que se aprende. Tampoco es algo que dependa por completo de las circunstancias, sino que también depende de nosotras. Podría parecer que en la estresante vida de la mujer moderna, con mil obligaciones y deberes, no hay espacio para vivir el momento. No es así. No hace falta que cambiemos de vida. Podemos aprender a sacarle jugo a la que tenemos. Y como la vida es una larga serie de momentos, esto se hace aprendiendo a extraer toda la felicidad que cada momento lleva consigo, incluso los momentos difíciles. Este libro pretende ayudar a la mujer de hoy en ese aprendizaje. Con sencillez, sabiduría y mucho sentido del humor, la autora nos muestra qué pasos concretos podemos dar para traer un poco más de felicidad a nuestro trabajo, a nuestra vida familiar y a nuestras relaciones. ¡Aprende a vivir el momento!

íNDICE

CAPITULO 1
Hay una razón por la cual a la infelicidad le gusta la compañía: porque ésta ayuda a ponerle fin. Sal y relaciónate con otras personas
CAPITULO 2
Es más fácil amar la lluvia que odiar tu chubasquero. Se puede encontrar alegría en la naturaleza
CAPITULO 3
¿Te vestirías con papel pintado? Rodéate de personas que te hagan sentir bien
CAPITULO 4
Reír es como llorar, pero sin los ojos hinchados. Busca lo ridículo para encontrar un alivio humorístico
CAPITULO 5
No seas el perro que anhela una caricia en la cabeza. Tú sabes cómo consolarte. De modo que hazlo
CAPITULO 6
Una manzana puede caer puede caer tan lejos del árbol como le apetezca. Lo único que puedes cambiar con respecto a tu familia es a ti misma
CAPITULO 7
Sufre, o usa tu imaginación. Es una cuestión de creatividad. Puedes darle un giro positivo a prácticamente cualquier cosa
CAPITULO 8
Algunas cosas son demasiado difíciles de comprender. Haciendo frente a la muerte
CAPITULO 9
En lugar de imaginarte a tu jefe desnudo, bórralo del todo. Encuentra un trabajo que te haga sentir bien contigo misma
CAPITULO 10
Cólocate justo en medio de tu sueño. Visualizar la vida que deseas podría llevarte a ella

De las venus paleolíticas a las vírgenes negras orígenes, simbolismo y continuidad de los cultos femeninos desde la antigüedad europea La idea central de este libro, trata de la continuidad. Hablamos del hilo que une a todos los seres desde el principio de la historia. Si bien los romanos pueden parecernos muy distintos de los hindúes, de los escitas o de las personas que pintaron Altamira, lo cierto es que sus intereses, sus inquietudes y sus percepciones de lo trascendente no eran tan diferentes. Hay una esencia que se reviste de formas culturales o religiosas aparen-temente distintas a lo largo del tiempo y el espacio, pero hay algo en todo eso que continúa, que sigue vivo y latiendo. Ese «algo» tomó, a lo largo del tiempo, distintos nombres y apariencias en los cultos femeninos desde la más remota antigüedad hasta nuestros días. Con independencia de si las llamamos Saraswati, Cibeles, Kuba-ba, Hécate, Ártemis, Anaitis, Deméter, Ishtar o María, son consideradas diosas diferentes en diversas culturas; sin embargo, todas ellas, todas nuestras diosas, provienen de una misma madre, la Diosa.