El arte de la guerra
El arte de la guerra
- EAN: 9788483525180
- ISBN: 9788483525180
- Editorial: Mandala Ediciones, S.A.
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 140 X 190 mm.
- Páginas: 86
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Disponible 48/72 hoas
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Tao Te King
Por esta razón, el Tao Te King es un libro para quienes no confían en las palabras y desean ir mucho más allá de lo verbalmente expresable. Un compañero imprescindible que, como el vino añejo, cambia y mejora con el paso del tiempo y destila nuevos sabores, impensados perfumes y pensamientos no descubiertos. Considerado como uno de los grandes libros sagrados de la humanidad, el Tao Te King no expone una religión o una filosofía, sino toda una manera de pensar y de vivir la vida en armonía con la naturaleza, con el Cielo y con la Tierra.
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Los cuatro libros del Emperador Amarillo : (Huangdi siging)
El taoísmo, inseparable del legado cultural de China, puede ser visto como una amalgama de folclore, esoterismo, literatura, mitos, leyendas, poesía, arte, filosofía, misticismo, yoga y meditación, además de cómo uno de los grandes pilares en los que descansa la «sabiduría perenne». Sin embargo, persiste la opinión generalizada de que el taoísmo sería una postura filosófica, o un arte de vivir, de naturaleza individualista, propia de renunciantes hastiados de la sociedad en que viven. No obstante, los problemas políticos fueron objeto de estudio y reflexión para autores taoístas de la época denominada de los Estados Combatientes (siglos V a III a.n.e.). La presente obra, perdida desde hacía tiempo, confirma la teoría de que, a principios del siglo II a.n.e., el pensamiento legista estaba estrechamente vinculado con el taoísmo.
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Tao Te Ching: texto ilustrado
El TAO TE CHING (El libro del sendero), de Lao Tzu, es una de las joyas de la humanidad, un tratado ya clásico sobre el arte de vivir cuya vigencia se extiende fuera de todo tiempo y lugar. Su figura central -el Maestro- es un hombre o una mujer que vive en armonía con el Tao, esencia irreductible del universo y fuente de toda vida. El Maestro es, así, un ejemplo vivo que nos enseña no sólo a gobernar sabiamente nuestra vida, sino también a dirigir ya sea un país, una empresa o una familia.
La presente versión está basada en la traducción inglesa de Stephen Mitchell, una de las más reputadas internacionalmente y de la cual se han vendido más de medio millón de ejemplares en todo el mundo. Su especial cualidad es que transmite con sencillez y claridad las enseñanzas de esta obra inmortal que a menudo resultan excesivamente crípticas en otras versiones. La adaptación que aquí presentamos ha sido contrastada con otras traducciones españolas e inglesas, aunque respetándose en todo momento el estilo claro y directo de la versión de Mitchell.
Las ilustraciones han sido seleccionadas por el doctor Stephen Little, director de arte oriental del Instituto de Arte de Chicago y una autoridad en arte chino y japonés. Se trata de un bellísimo conjunto de pinturas realizadas por artistas taoístas o por pintores de inspiración taoísta, cuidadosamente elegidas para realzar el espíritu y la poesía de estas magistrales enseñanzas. Los interesados hallarán una detallada información acerca de las mismas al final de esta obra.
STEPHEN MITCHELL es mundialmente reconocido por sus extraordinarias traducciones al inglés de obras espirituales. Nació en Brooklyn, Nueva York, en 1943, y estudió en Amherst, en la Universidad de París y en Yale. Entre sus obras destacan "The Enlightened Mind", "The enlightened Heart", "The gospel according to Jesus" y "The book of Job".
DR. STEPHEN LITTLE, restaurador jefe y director del arte asiático en el Instituto de Arte de Chicago, es una autoridad en arte chino y japonés. Estudió en la Universidad Cornell, en la U.C.L.A. (Universidad de Los Ángeles, California) y en Yale. Es autor de múltiples publicaciones sobre arte de inspiración taoísta y budista,y sobre arte oriental en general.
dto.
El auténtico Confucio : vida, pensamiento y política
Cuando se hallaba en la cima de su carrera política, Confucio renunció repentinamente a su cargo y se puso en camino sin ninguna perspectiva y con muy poco dinero. Corría el 497 a.C. Tenía entonces cincuenta y cuatro años y ocupaba el cargo de ministro de Asuntos Penales -parecido al de un ministro de Justicia- en su estado natal de Lu. Aquella decisión puso fin en esencia a su carrera pública, pero él no podía saberlo en ese momento. Confucio había deseado siempre situarse en un lugar próximo a los niveles más elevados, aunque no por los motivos habituales. No buscaba unos nuevos ingresos ni un cargo con poder adicional. Sus ambiciones perseguían un fin noble, pero, para conseguirlo, necesitaba más influencia política.
«Igual que Sócrates y Jesucristo, Confucio concibió su pensamiento sobre la palabra hablada con todos los matices de la enigmática sabiduría antigua. Annping Chin nos ayuda a recuperar esos matices como nadie lo ha hecho hasta ahora.»
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