Necesitamos creatividad para cambiar y transformar: del dolor al bienestar; de la separación a la unión; de la soledad desesperante a la soledad creativa; de la represión a la expresión; de la coraza al corazón.

Necesitamos una creatividad práctica que nos facilite salir de la rutina estresante, de la desunión y la desvinculación con nuestra esencia. Una creatividad atrevida, que abra los ojos para ver y darse cuenta, los corazones para sentir y ser, para poder ver más allá de lo aparente, ver la verdad y vernos al espejo.

La creatividad es un don que cada uno de nosotros tenemos. Este libro te dará pautas para tener el poder creativo en tus manos. Así dejarás de ser un náufrago a merced de tus hábitos, las circunstancias, los demás y el tiempo, para ser el que llevas el timón de tu vida.

Este libro te acompañará a descubrir cuál es tu timón, como cogerlo fuerte y dejar que guíe tu vida, te abrirá a escuchar tu intuición, tu tutor interior que estimula la verdadera creatividad. Te dará pautas para pasar de la intención a la acción, de la teoría a la experiencia.

Descubre la creatividad que te da la fuerza para sacarte de estar en la prisión de un sueño equivocado. Una creatividad para recrear y reinventar el ser, que se mueva desde la conciencia despierta y así haga circular una energía facilitadora de transformación positiva en el sistema humano, en los pensamientos y sentimientos.

Es una energía sanadora y creadora de un nuevo paradigma. La salud personal, la salud del planeta y la salud de la humanidad dependen de que todos trabajemos creativamente.

Tú puedes ser más creativo. Atrévete.

Confianza total

Las riquezas mundanas han sido temidas, despreciadas, condenadas e incluso odiadas, a causa de la ignorancia del ser humano acerca de cómo puede poseerlas sin ser poseído por ellas. En el otro extremo nos encontramos a la codicia, la adoración al dinero y el miedo atroz a perderlo. El hombre sabio evita ambas actitudes, pues sabe que las riquezas mundanas son sólo un reflejo de la verdadera riqeuza espiritual, que es lo que debemos buscar en primer lugar y siempre. Una vez encontradas las riquezas del cielo, no se pueden evitar las de la tierra, salvo que uno las repudie expresamente. Debemos saber discernir y no despreciar que simboliza la bendición divina, pero tampoco podemos dedicar nuestra vida a conseguir algo que no es la verdadera riqueza. El primer paso para lograr la prosperidad es mantener la actitud correcta en la mente y en el corazón, darnos cuenta de que la prosperidad y la espiritualidad deben de ir unidas en esta tierra y que el hombre es quien debe de realizar esta unión.