Naishkarmyasiddhi : la realización del sí-mismo

Naishkarmyasiddhi : la realización del sí-mismo
- EAN: 9788492948802
- ISBN: 9788492948802
- Editorial: Sanz y Torres, S. L.
- Año de la edición: 2011
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 130 X 210 mm.
- Páginas: 174
Disponible 48/72 horas
Comentarios de los lectores

Aquello que esta fuera o más allá del karma
Este texto clásico del "Vedanta Advaita" fue escrito en el siglo VIII por Sri Suresvaracharya, discípulo directo del gran maestro Sri Shankaracharya.
Manuel | Ago 2012. Madrid (España)
El título de la obra procede de la palabra, "aquello que esta fuera o más allá del karma", y "Siddhi" o "poder". Tal título parece haber surgido de un verso de la "Bhagavad Gita" (Cap. VIII.49) en donde Krishna afirma que: "Aquel que tiene un entendimiento desapegado de todas las cosas, que ha vencido su mente y no tiene ya deseos, alcanza por la renuncia el estado más elevado de perfección, libre de todo actuar". Este "estado más elevado de perfección libre de toda la acción" es precisamente Naishkarmyasiddhi.
"Suresvaracharya" enseña que este libro al "tratar de la Realización de Sí-mismo" no se le debe dar a quien no esté debidamente cualificado, que no haya desarrollado indiferencia hacia las experiencias mundanas y que no haya dejado a un lado sus deseos temporales... cuando se ha comprendido correctamente lo que se ha dicho en este libro, no queda deseo alguno de conocimiento mundano. Pero sólo lo entenderán correctamente los renunciantes a toda acción. De este modo, para aquel que conoce al Sí-mismo no hay ya más "yo" y "mí"; como no hay ya más oscuridad para aquel que lleva en la mano una lámpara encendida. Yo recibí esta doctrina pura de los Paramahansas habiendo servido a los pies de Sri Shankaracharya, que destruyó la oscuridad interior de mi alma".
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La Agenda de la Madre 10 - 1969
Esta vez, Madre ha encontrado ya el “paso”, lo que ella va a llamar la “consciencia nueva”, la que puede abrirnos un mundo nuevo, del mismo modo que el primer espejo de agua roto por un anfibio, nos abrió a un nuevo aire: “No sé lo que está pasando, es un estado de vibración intensa, como ondas de una rapidez fulminante, tan rápidas que parecen inmóviles. Y de este modo voy a América, a Europa… Jamás este cuerpo había sido tan feliz: estas células, y otras células, es la vida por doquier, la consciencia por doquier, ¡todos los demás cuerpos son él!...” Y todas nuestras miserias fisiológicas se desvanecían al mismo tiempo: “Es como una dilatación de las células, los límites se atenúan, se borran incluso, y además los dolores se van FÍSICAMENTE”.
Y no se trataba de “otro mundo”, sino de la Tierra, pero vivida de otra forma: “¡Como si un día hubiéramos entrado en una mentira irreal, que luego desaparece cuando se sale de ahí, deja de existir! Y todos los medios artificiales de salir, incluso el Nirvana, no valen para nada. ¡LA SALVACIÓN ES FÍSICA! Está aquí, está aquí. Y todo lo demás, incluida la muerte, no es más que una mentira. ¡No existe la desaparición! No existe “la vida y la muerte”…
Y mientras Madre atraviesa las paredes de nuestra pecera mental, es todo el mundo el que se rebela, también el de su entorno, como si fuera sometido a la presión de una atmósfera nueva: “¡Cantidad de deseos de que este cuerpo muera, por todas partes, los hay por todas partes!... Toda una gama, desde la inquietud y las ganas de que acabe pronto, hasta los deseos más impacientes: ¡libres por fin!... No quisiera que me metan en un ataúd, estas células son conscientes… ¿Qué podrá pasar? No lo sé. Va en contra de todos los hábitos”.
Una especie nueva va en contra del viejo hábito del mundo. ¿Acaso el mundo la aceptará, o terminará matándola?
dto.